En épocas pasadas, el contacto con lo paranormal era una materia totalmente hermética. Solo unos pocos elegidos, poseedores de dones especiales, eran capaces de atravesar esos umbrales que conducían a mundos más allá del nuestro.
Ahora todo cambió.
Hoy en día, mediante algunos objetos específicos unidos a ciertas reglas, cualquiera de nosotros tiene al alcance la posibilidad de abrir puertas hacia lo desconocido, hacia reinos tan seductores como peligrosos.
El juego en el que se sumergió Alex, el protagonista de esta historia, es una de estas posibilidades. Él se animó a atravesar uno de los portales más sombríos, uno que, una vez abierto, puede tornarse aterradoramente peligroso si no se obedece una sencilla regla: no mirar hacia atrás.
Ahora todo cambió.
Hoy en día, mediante algunos objetos específicos unidos a ciertas reglas, cualquiera de nosotros tiene al alcance la posibilidad de abrir puertas hacia lo desconocido, hacia reinos tan seductores como peligrosos.
El juego en el que se sumergió Alex, el protagonista de esta historia, es una de estas posibilidades. Él se animó a atravesar uno de los portales más sombríos, uno que, una vez abierto, puede tornarse aterradoramente peligroso si no se obedece una sencilla regla: no mirar hacia atrás.