Desde tiempos inmemoriales, muchas leyendas, fábulas y mitos de todas las latitudes hablan de árboles mágicos, que se mueven solos, crecen hasta el infinito o están dotados de habla. En Montevideo hay un árbol de este tipo, ubicado en pleno corazón del Prado. Se trata de un árbol diferente a todos los demás y dicen que si uno se acerca a él, puede escuchar una historia de amor que muchos en el barrio recuerdan de una manera muy especial.