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martes, 21 de junio de 2016

ALARIDOS, SIGNOS Y SILBOS: CELEBRACIÒN DE LA COMUNICACIÒN HUMANA




Ululato (del latín “Ululatus”) cuyo significado quiere decir: clamor, grito, lamento o alarido. Son utilizados durante siglos por múltiples culturas alrededor del mundo, en ceremonias religiosas o espirituales, festividades, especialmente por las mujeres, a modo de expresar alegría. Aunque también como expresión de dolor y furia ante situaciones dramáticas o desastrosas.

El nombre hebreo para el alarido o grito de alegría es el "tsahalulim"
En Marruecos es barwalá o youyou
En Oriente Medio, Zagharit o Zaghareet
En África del Este, ililta
En hausa se le llama guda
En swahili es udhalili, sigalagala en el dialecto Luo, en Zulu lilizela, en Tsonga nkulungwani y en Shona kupururudza.
En Galicia, aturuxo
En vasco, irrintzi
En tamil, Sri Lanka, kulavai
En kerala, es kurava
En bengali se llama ulu-uli
En shona, Zimbabwe, es mhururu

Y en shona, el lenguaje silbado que utilizan se llama mheterwa. 

El lenguaje silbado es otra genialidad del ser humano para comunicarse a través de abruptos cañones y altas montañas. No son lenguas, sino conversiones de los fonemas de una lengua ya existente en silbidos con unos tonos, longitudes e intensidades determinadas. Se puede realizar a grandes distancias: a veces alcanza los 5 km. No solo trasciende el terreno inaccesible, sino también las fronteras, ya que se usa en lugares tan alejados entre sí como:

En México:






En Turquía:





En el pueblo de Aas, Francia. En la aldea Antia, Grecia (σφυριχτή γλώσσα)

Y en La Gomera, Islas Canarias, España.






Iltyem-Iltyem, que significa "señas con las manos" en los idiomas de los aborigen anmatyerr de Australia, es el nombre del proyecto que lucha por preservar las lenguas de signos tradicionales de cuatro comunidades aborígenes en Australia. Estas lenguas de signos se han utilizado durante generaciones para comunicarse en la distancia, para conversar en secreto (para los secretos comerciales, por ejemplo) o para no asustar a los animales durante las cacerías. O también en situaciones cotidianas cuando hablar es considerado un gesto de mala educación o tabú (por ejemplo, en el duelo, o en relación a los tabúes sobre las madrastras y las viudas.)

Para reconocer esta práctica forma de comunicación, el productor Willi Lempert se asoció con un grupo de entusiastas aborígenes mayores de la comunidad de Balgo. Las señales manuales que utilizan, "Marumpu Wangka", han servido tradicionalmente como forma de comunicación entre los aborígenes del Gran Desierto Arenoso de Australia Occidental. Juntos crearon un video que cuenta la historia de 40 signos manuales.




Marumpu Wangka! Kukatja Hand Talk from Willi Lempert on Vimeo.

"El problema más grande de una persona sorda no es simplemente que él o ella no puedan oír, sino el hecho de que la carencia del oído es socialmente aislante." Nora Ellen Groce, "Everyone Here Spoke Sign Language"

Una elevada tasa de sordera hereditaria está documentada en Martha's Vineyard, una isla situada alejada de la costa este de los Estados Unidos, durante casi dos siglos. Uno de cada cuatro niños era sordo al nacer, aunque según el neurólogo Oliver Sacks "a los sordos del lugar no se les veía como sordos; eran simplemente granjeros, eruditos, profesores, hermanos, hermanas, tíos, tías" Asi fue como la mayoría de los residentes de este lugar desarrollaron la lengua de señas, la MVSL, la lengua de señas de Martha Vineyard, hasta mediados del siglo XX. Esto permitió a los residentes con discapacidades auditivas a integrarse sin problemas dentro de la sociedad.

"Cuando visité la Universidad Gallaudet de Washington y hablé de "deficiencias auditivas"", cuenta Oliver Sacks, "uno de los alumnos sordos me dijo por signos:

-"¿Por qué no considera que usted paredece una deficiencia de signos?"

Oliver Sacks. En movimiento. Una vida.

NO PIENSES EN UN ELEFANTE: EL PODER DE LAS METÀFORAS


"Cuando enseño el estudio del cambio de marco (estructura mental), lo primero que hago es darles a los estudiantes un ejercicio.
El ejercicio es: "No pienses en un elefante".
Hagas lo que hagas, no pienses en un elefante.
No he encontrado todavía un estudiante capaz de hacerlo. 
La palabra se define en relación con ese marco. Cuando negamos un marco, evocamos el marco.

Richard Nixon lo descubrió por la vía dura. Presionado para que dimitiera durante el escándalo del Watergate, se dirigió al país a través de la televisión. Se presentó ante los ciudadanos y dijo: 
- «No soy un chorizo.» 
Y todo el mundo pensó que lo era."

George Lakoff (Berkeley, 1941) investigador de lingüística cognitiva, y el filósofo Mark Johnson, continúan explicando en el libro "Metáforas de la vida cotidiana":

"Los filósofos y los lingüistas han tendido a tratar la metáfora como un asunto de interés periférico. Sin embargo, nuestro lenguaje común es mucho más metafórico de lo que a menudo advertimos"


"En nuestra cultura, por ejemplo, es muy poderosa la metáfora "la discusión es una guerra". Decimos que alguien "se atrincheró en sus posiciones"; o "atacamos los puntos débiles del contrario", o "destruimos sus argumentos" hasta salir "vencedores". Pero lo importante es que no nos limitamos a hablar de la discusión como si fuese una guerra, sino que vemos a la otra parte como un contrincante, nos defendemos, agredimos...¿Cómo se viviría la discusión en una cultura en que la metáfora fuera un baile en que ambos participantes deben marchar al compás?"

Otros ejemplos son: el amor como viaje ("tenemos que ir más lento, vamos demasiado rápido"; "su matrimonio naufragó") o el tiempo es dinero (me haces perder el tiempo).

"Actuamos como si el tiempo fuera una cosa valiosa y concebimos el tiempo de esa manera. Estas prácticas son relativamente nuevas en la historia de la raza humana, y en absoluto existen en todas las culturas. Han aparecido en las sociedades industriales modernas y estructuran nuestras actividades básicas cotidianas de manera muy profunda."


"Son reflejo de conceptos metafóricos sistemáticos que estructuran nuestras acciones y nuestros pensamientos. Están "vivos" en un sentido más fundamental: son metáforas en las que vivimos"

"De la misma manera que hemos tomado las metáforas de nuestra cultura como verdades, a menudo, consideramos los mitos de nuestra cultura también como verdades." Y en este caso, "nosotros argüimos que la filosofía objetivista no puede explicar la forma en que entendemos nuestra experiencia, nuestros pensamientos y nuestro lenguaje."

Escribía Eagleton “La llamada a unas naturaleza, ciencia y razón desinteresadas, como opuestas a la religión, la tradición y la autoridad política, sencillamente enmascaran los intereses del poder a los que estas nobles nociones sirven en secreto”

"Como veremos, el mito del objetivismo en sí mismo no es objetivamente verdadero, pero eso no lo convierte en algo despreciable o ridículo. Forma parte del funcionamiento cotidiano de todos los miembros de nuestra cultura. Es necesario examinarlo y entenderlo."

Lo grave del mito objetivista no es su carácter mítico. No; lo grave, lo pernicioso de ese mito es que "hace tanto de los otros mitos como de las metáforas objeto de desprecio y desdén” 



"De cuantos mitos se han ido dotando las distintas culturas, el mito de la ciencia es, sin duda, el más intransigente, el que mayor celo ha puesto en la persecución de cualesquiera otras constelaciones míticas. El fundamentalismo científico es la gran aportación del imaginario europeo al panorama actual de los integrismos" asegura el matemático y filósofo Emmánuel Lizcano. Y explica:
"Y ahí es donde está la verdadera dimensión política de la ciencia. Ahí también su eficacia, su capacidad para persuadirnos de que no estamos siendo persuadidos, su pretensión de destino. Por ejemplo, no caben políticas (o sea, decisiones) distintas porque la cruda ‘realidad’ económica (o sea, el destino) no las permite: “Hay que ser realistas".

"Las metáfora que las tribus occidentales ha generado en los últimos cuatro siglos no tiene nada que envidiar a los de otras sagas que le precedieron. Ni sus metáforas son menos imaginativas: el mundo como máquina, lo invisible como materia oscura, el mercado como autorregulación, o la sociedad como suma de partículas votantes"



"Un buen ejemplo puede ofrecerlo la persistencia actual del viejo mito ilustrado del Progreso. “Los talibanes viven en plena Edad Media”, se repetía sin cesar durante la guerra de Afganistán. 
Pero lo significativo no es que los políticos y los medios de comunicación lo dijeran, sino que todos lo entendiéramos sin el menor asomo de extrañeza. 
Dejando de lado esa otra magnífica metáfora zombi que es la ‘Edad Media’ (la singularización de cierta edad como ‘media’, como si no lo fueran todas salvo la primera y la última), ¿ese mismo ‘atrás’, término espacial, por el que todos acabamos de entender ‘antes’, término temporal, no expresa la misma ideología del progreso?

Si el futuro se labra es porque es una tierra que se supone fértil y no árida o amenazadora. Si el pasado es un lugar en el que uno se puede quedar atrapado o anclado es porque, al contrario 
que el futuro, ése no es un buen lugar, ni es fértil ni vale la pena labrarlo: es un lugar del que hay que huir.

En lugar de “atados al pasado” podemos hablar de estar “atados al futuro” y, de repente, toda una serie de figuras irrumpen en el escenario: quienes han hipotecado su presente en créditos, planes de pensiones y seguros de vida, los ciudadanos que han de apretarse el cinturón al haberse comprometido sus Estados a “entrar en la modernidad”. o el de ciertas culturas indígenas que hoy se reorientan a “labrar el pasado” para cultivar en él los frutos que el “camino hacia la modernidad” ha prometido tanto como ha frustrado."



"La lucha por el poder es, en buena medida, una lucha por imponer las propias metáforas. Recuerdo el análisis que hacía una doctoranda que estaba trabajando sobre el conflicto entre un grupo de mariscadoras gallegas y la Administración local. Llegados a un punto que reclamaba un diálogo, la Administración impuso la metáfora que para ella era natural: había que constituir una ‘mesa de negociación’. Ya daba igual lo que en esa mesa pudiera acordarse, apuntaba mi alumna, en el mero hecho de haber asumido esa metáfora las mariscadoras ya habían perdido la batalla, como de hecho la acabaron perdiendo. La mesa es lugar natural de negociación para el burócrata, el habitante natural de los despachos, pero no lo era para aquellas mujeres. Para ellas, el lugar donde se discutían los asuntos comunes, donde se negociaba y se tomaban decisiones, es decir, el lugar propiamente político, era la playa, donde se reunían con ocasión de mariscar. La mesa como lugar político era para ellas un lugar extraño, terreno enemigo. Hubieran debido, concluía la perspicaz doctoranda, acuñar su propia metáfora e imponérsela a aquellos políticos, hubieran debido llevarles a la ‘playa de negociaciones’. Las decisiones habrían sido muy diferentes. Esto es todo. Espero, si no haberles ilustrado, sí al menos 
haberles contagiado algo de mi pasión por las metáforas, esos sorprendentes duendes del imaginario que nos habitan en secreto. 
Conservadlas, y conservareis el mundo. 
Cambiadlas, y cambiareis el mundo."


Fuentes:
 http://www.textosenlinea.com.ar/academicos/Lakoff%20-%20No%20pienses%20en%20un%20elefante.pdf

CUENTOS DE DIVERSAS CULTURAS PARA UN MUNDO DIVERSO (ANIMACIONES)


"Aquí dejo mi historia, para que otro la lleve" dicen colocando las palmas en el suelo, en algunos lugares del continente africano cuando terminan un cuento.

"Hay una historia entre vosotras, quien la busque la encontrará..." comienzan diciendo las mujeres imazighen, y lo terminan así: "Y me puse el calzado nuevo, y anduve de aquí para allá, y se me rompió"

Entre los Hausa, es costumbre que el orador exclame:
- Tengo una historia.
Y su público pida:
- ¡Sea pues, sea pues! 

"¡Contemos cuentos! ¡Los cuentos pasan!" dicen en Benin antes de la narración.

Los cuentos nos cogen de la mano y dirigen nuestra atención a recovecos, a rincones de estos países en los que quizá, jamás, nos podríamos adentrar. A fuerza de leer y oír cuentos de todo el mundo hemos ido aprendiendo cómo es la selva, cómo se vive en el desierto, cuán traicioneros pueden ser algunos animales y algunos hombres, pero también cuán generoso es el género humano en cualquier rincón del mundo. Dice León Felipe:


Yo no sé muchas cosas, es verdad.
Digo tan sólo lo que he visto.
Y he visto:
que la cuna del hombre la mecen con cuentos,
que los gritos de angustia del hombre los ahogan con cuentos,
que el llanto del hombre lo taponan con cuentos,
que los huesos del hombre los entierran con cuentos,
y que el miedo del hombre...
ha inventado todos los cuentos.
Yo no sé muchas cosas, es verdad,
pero me han dormido con todos los cuentos...
y sé todos los cuentos.

Cuando Añá apagó las fogatas, Tupá creó los isondúes. Un relato guaraní en el que el fuego y los bichitos de luz tienen algo en común.


El mito de la Abuela Grillo, cuenta que en un principio, la abuela de los ayoreos era un grillo llamado Direjná. Era la dueña del agua, y donde ella estaba, también estaba la lluvia. Sus nietos le pidieron que se fuese. Cuando lo hizo, todo fue calor y sequedad. La abuela Grillo decidió vivir en el segundo cielo y desde allí es capaz de enviar lluvia cada vez que alguien cuenta su historia.


Los ayoreos son cazadores-recolectores nómadas actualmente reducidos a unas pocas comunidades en Bolivia, Paraguay y el norte Argentina.



Canción en Idish con un trabajo de animación espectacular de arena, de Sally Heckel.




"En cada adulto hay un niño del recuerdo, como en cada niño hay un adulto de esperanza. Allí duermen todo el tiempo..."
Luis Salvador Efraín Salazar Arrué, más conocido por su pseudónimo Salarrué, fue un salvadoreño que nos hizo soñar con sus cuentos de cipotes y demás obras. El encanto de los Cuentos de Cipotes reside esencialmente en su pretensión de reproducir el lenguaje coloquial de los niños salvadoreños, un lenguaje que es ya urbano y callejero.
"El cuento de cipotes es la magia que provoca al adulto que hay en el fondo del niño, para consolar al niño que hay en el fondo del adulto"


Malaika es una niña africana, princesa de una manada de elefantes, que vive sobre el lomo de su padre Komba. En el largo viaje por encontrar los bebederos de agua, Malaika entenderá que la memoria es la clave de la supervivencia de los elefantes.

El viaje les deparará peligrosos cazadores a su acecho, días de sequía y bebederos sin agua; pero también un maravilloso encuentro con los sagrados Baobabs, misteriosos árboles de la sabana, que crecen al revés. Un corto de Lizardo Carvajal.



"The Potter", El alfarero, es un corto de animación del estadounidense John Burton, para entender un proceso de enseñanza. Los protagonistas son el alfarero hechicero y un joven aprendiz que desea desarrollar el oficio. A través de esta historia, observamos cómo con la ayuda y la guía de un maestro, el alumno va adquiriendo conocimientos que le permiten desarrollarse por sí mismo.


Filme basado en un cuento popular africano, Karabá es una malvada bruja que domina un poblado en el corazón de África. Kirikou es un niño pequeño, al que pocos toman en serio por su escaso tamaño, pero que es el único que consigue recobrar algunas cosas que la bruja había robado. Es también el único miembro de la tribu que tiene valor para enfrentarse con ella. Es tan listo que nace solo del vientre de la madre y se baña solo.



"Los niños y niñas necesitan cuentos para entenderse y entender el mundo", dicen en Potopoto. Potopoto es el barrizal que se crea en época de lluvias en África, y también el deseo de una madre Ecuatoguineana que procura reconstruir las historias que le contaban sus abuelos y abuelas en su comunidad "frunciendo el ceño para hacer memoria". 

“Me llamo Alejandra Evui Salmerón Ntutumu y mi sueño es poder crear un mundo de fantasía inspirado en los cuentos africanos que mi madre me contaba cuando era niña. Mi propósito es despertar la imaginación de los niños y niñas recuperando los cuentos olvidados de la comunidad afro de habla hispana para que los más “peques” tengan referentes más diversos. Potopoto es el fango típico de la época de lluvias en Guinea Ecuatorial. Un lugar que llama para ensuciarnos las caras y volver a ser niños. Los libros son demasiado blancos, tenemos que ensuciarlos con potopoto. ¿Nos ensuciamos?”
Así, Potopoto se convirtió en el primer libro infantil ilustrado de cuentos multiétnicos de Guinea Ecuatorial en español para niños de entre 4 y 8 años y un proyecto cultural que apuesta por la diversidad (étnica, funcional, de género...) y el reconocimiento de los pueblos ‪afro‬:


https://afrofeminas.com/2016/04/06/potopoto-los-ninos-y-ninas-necesitan-cuentos-para-entenderse-y-entender-el-mundo/


Y desde Potopoto me llegó este precioso cuento de Abdul Ndadi, de Ghana, que nos advierte que, "sankofa", "un árbol sin raíces no se puede sostener".
En el corto se pueden ver símbolos visuales adinkra, que son comunes en varias culturas y civilizaciones del oeste africano, como el "sankofa", símbolo de la importancia de volver al pasado, o las espirales que lleva la tortuga en su caparazón, o "adinkrahene", símbolo de grandeza, carisma y liderazgo. Creados originalmente por la etnia Ashanti de Ghana y los Gyaman de Costa de Marfil, cada símbolo adinkra tiene un significado propio, y también un nombre y un proverbio asociado.
Y mucha, mucha sabiduría.



ESTE MAPA MUESTRA LOS SÍMBOLOS SAGRADOS MÁS ANTIGUOS DE LA HUMANIDAD

EL ANIMISMO DEL HOMBRE PALEOLÍTICO QUEDÓ IMPRESO EN UNA SIMBOLOGÍA TAN SIMPLE COMO SACRA Y RITUAL; AQUÍ LOS SÍMBOLOS MÁS COMUNES ALREDEDOR DEL MUNDO


Quizá sólo después de que el hombre fue capaz de la autoconciencia, es decir de reconocerse existiendo, la segunda noción más antigua fue la de relacionarse con el entorno de una forma trascendente. Esta interacción con las fuerzas y elementos que nos rodean muy posiblemente comenzó ya inmersa en un carácter sacro, herramienta natural para relacionarnos con un mundo misterioso y completamente desconocido. Así, resulta fácil imaginar ese halo de divinidad que emanaba todo, desde los árboles y el fuego hasta la tormenta, el eclipse o la encrucijada.

En ese contexto animista que reinó en buena parte de nuestra trayectoria en el planeta, de la cual por fortuna aún quedan algunos ecos, cada objeto, y por lo tanto su representación pictórica, tenía un carácter sacro. Así que un catálogo de los primeros símbolos sagrados utilizados por el hombre incluye, para nuestra sorpresa, piezas ultrasimples que si bien para nosotros podrían parecer abstracciones infantiles, en realidad contenían una carga ritual importante y alimentaban los primeros cimientos de las primeras cosmogonías.

En este sentido valdría la pena reflexionar sobre la simpleza de la espiritualidad original (y de hecho de la realidad en sí), en contraste con la rebuscada "sofisticación" de la retórica espiritual contemporánea, esa vistosa lasaña que germina hoy. Tal vez la búsqueda espiritual, al menos la más genuina, sea infinitamente más simple de lo que actualmente pretendemos.

La especialista en pinturas rupestres Genevieve von Petzinger realizó una especie de censo que registra la repetición de ciertos símbolos, todos trazados durante el paleolítico, de acuerdo con las distintas regiones del mundo en donde se han encontrado cavernas impresas. La repetición de representaciones no sólo alude a los elementos ambientales con los cuales se relacionaban los hombres de aquellos tiempos, seguramente también revela algunas pinceladas de arquetipos que con el tiempo irían consolidándose en la mente colectiva –y que permanecen hasta la fecha.


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FUENTE: PIJAMASURF

"CHIFLIDOS EN LA NIEBLA": EL LENGUAJE SILBADO DE LOS INDÍGENAS DE OAXACA (VIDEO)

EN LA SIERRA MAZATECA UNA POBLACIÓN INDÍGENA SE COMUNICA CHIFLANDO, EN UN MUSICAL Y ECONÓMICO LENGUAJE QUE VUELA POR LAS MONTAÑAS

Son varias las poblaciones en el mundo que utilizan un lenguaje chiflado o lenguaje de silbidos para comunicarse como una importante alternativa al lenguaje de palabras. Uno de los pueblos que usa el lenguaje por silbidos es el de los pobladores de Sochiapam, quienes hablan chinanteco y una variación chiflada del mismo. Este lenguaje consta de 31 distinciones de tono y acento y tiene la capacidad de simplificar mensajes complejos eliminando ambigüedad. Cotidianamente son los hombres los que practican este lenguaje, aunque las mujeres también lo entienden. Existen varios otros lugares en el mundo donde se habla el lenguaje silbado; el más famoso es la isla de La Gomera. 

El excelente documental Chiflidos en la niebla estudia este fascinante fenómeno en la sierra mazateca de Oaxaca, donde las personas utilizan los silbidos para atravesar la niebla, y con cierta elegancia, ya que los chiflidos permiten comunicarse a grandes distancias y a la vez evitar gritar en público, algo que nunca hacen --y seguramente todos nos beneficiaríamos de hacer lo mismo. Además, este modo de comunicarse es mejor para las cuerdas vocales. 

El documental  analiza con tecnología los sonidos que emiten los chinantecos y da numerosos ejemplos de la riqueza de significados que puede comunicarse chiflando, confiriendo en el tono información de distancia, estados de ánimo, deseos, tareas a realizar, advertencias. Cosas como preguntar si "tienes calabaza en tu milpa" o avisar que "tienes hongo en tu milpa" son usuales. 

El nombre del documental hace alusión a un posible origen o al menos uno de los usos importantes que tienen los chiflidos en estas zonas altas cuando no se puede ver y, a la distancia, el chiflido es una forma de ver con el sonido, una luz de aire compartida. Por otra parte, al final del chiflido hay una caída de tono que avisa que la comunicación ya acabó, lo cual es muy útil y diplomático, algo que no ocurre en nuestras conversaciones atropelladas. 

Según el documentalista Mark Sicoli, también profesor de lingüística, el chinanteco silbado podría desaparecer en los próximos 10 años, lo cual sería otra tragedia más para la cultura mexicana.



FUENTE: PIJAMASURF