Medicina y algo + N°07 - Después del aborto, vacunas para matar a los niños ya nacidos
Luego de la aprobación de media sanción de la ley que pretende la despenalización y legalización de la práctica criminal y homicida del aborto, la Dr. Chinda Brandolino expone los casos en los que alrededor del planeta, se avanza también sobre otra práctica igual de letal e inhumana sobre los más indefensos: los planes de vacunación obligatorios por parte del Estado. La élite, tras la industria farmacéutica, avanza en la imposición de la agenda maltusiana de control de la población, coptando a los políticos que legislan en favor de sus macabros planes, ejemplo de ello, fue la media sanción en Diputados, de la ley de aborto pocos días atrás. ONG's financiando desde el exterior organizaciones sociales, medios de comunicación y políticos corruptos, para ejercer presión sobre una cuestión que ya ha dejado de pertenecer al pueblo argentino en su totalidad, y que hoy, sobrevive a duras penas, tan solo en la consciencia y el corazón de una pequeña porción de la sociedad que aún no reacciona del todo a este terrible embate de la plutocracia internacional: la existencia del futuro de la nación argentina.
Luego de la aprobación de media sanción de la ley que pretende la despenalización y legalización de la práctica criminal y homicida del aborto, la Dr. Chinda Brandolino expone los casos en los que alrededor del planeta, se avanza también sobre otra práctica igual de letal e inhumana sobre los más indefensos: los planes de vacunación obligatorios por parte del Estado. La élite, tras la industria farmacéutica, avanza en la imposición de la agenda maltusiana de control de la población, coptando a los políticos que legislan en favor de sus macabros planes, ejemplo de ello, fue la media sanción en Diputados, de la ley de aborto pocos días atrás. ONG's financiando desde el exterior organizaciones sociales, medios de comunicación y políticos corruptos, para ejercer presión sobre una cuestión que ya ha dejado de pertenecer al pueblo argentino en su totalidad, y que hoy, sobrevive a duras penas, tan solo en la consciencia y el corazón de una pequeña porción de la sociedad que aún no reacciona del todo a este terrible embate de la plutocracia internacional: la existencia del futuro de la nación argentina.